Está claro que cuando uno compra un producto o un servicio lo ideal es hacer una compra que tenga las tres conocidas Bs (bueno, bonito y barato) no obstante en desarrollo web son tres conceptos que difícilmente pueden ir de la mano.
Si me conoces un poco sabrás que me gusta bastante todo lo relacionado con los coches. Si me conoces algo más sabrás que me atrae el mundo de la potenciación y mejoras del coche en general (tuve un Ford Fiesta al que aumentamos su rendimiento en un 26%). Hay un dicho que ilustra a la perfección algo que te encuentras cuando aumentas la potencia de tu coche: “Potencia, fiabilidad y economía. Escoge dos“. Si quieres aumentar la potencia y continuar teniendo un coche fiable, te saldrá caro. Si quieres gastarte poco y tener mucha potencia, olvídate de la fiabilidad. Si quieres mantener la fiabilidad sin un gran presupuesto no esperes ganar mucha potencia.
En el mundo del desarrollo web nos encontramos con lo mismo si hablamos de proyectos con cierta complejidad (no de la típica página-tarjeta de presentación que puede hacerse a base de plantillas). Si quieres un desarrollo bueno (funcionalidades personalizadas por ejemplo) y bonito probablemente te salga bastante caro (de ti dependerá decidir si te sale a cuenta, a mucha gente sí le vale la pena). Si tienes menos presupuesto y quieres algo bonito seguramente no tendrás virguerías a nivel de programación y si quieres una página funcional sin que se dispare el precio olvídate de un diseño demasiado personalizado.
Me gustaría que dieras tu opinión acerca de este tema, tanto si eres clientes de servicios de este tipo como si eres proveedor.